Opinión

Las oficinas del futuro, menos jerarquías y más un ‘club social’ Por: Miguel Alberto Zurita Sánchez

Las oficinas del futuro, menos jerarquías y más un ‘club social’

Los lugares de trabajo se convertirán en un espacio para impulsar el factor humano y la creación de ideas.

Para Stone Designs, un despacho español de diseño de interiores, en la actualidad, las oficinas «representan un pueblo en el que los directivos conviven con el resto de sus equipos de forma natural, desenfadada, cercana y sencilla», dice Virginia Higuera.

Lo más importante en estos espacios futuristas no es sentarse tras un inmenso escritorio, sino la flexibilidad, la generación y el intercambio de ideas acompañado de una alta tecnología en interconexión.

A partir de eso, los diseñadores comienzan a dar rienda suelta a la creación de ambientes donde el factor más importante es el humano.

«Si antes el diseño iba enfocado a un reconocimiento de poder a través de los espacios, eso ya no importa, la mayoría del trabajo se hace o no en la oficina», comenta Fernando Gutiérrez Ahrensburg, de la Asociación Mexicana de Interiorismo Corporativo.

«Las oficinas del futuro serán diferentes y van a parecer más un club social», añadió.

Humanización de los espacios

Humanización de los espacios

Si el Dr Paul MacLean, fuese consultado, debido a esa aseveración, es muy probable que dijera algo así, “al fin el proceso evolutivo del cerebro, coloca al Neocórtex, en el lugar que le corresponde”.

¿Por qué respondería el Dr MacLean, de esa manera?

Para saber porque respondería de esa manera, es mejor refrescar los conocimientos acerca del Dr MacLean y su trabajo.

Paul D. MacLean (1 de mayo de 1913 – 26 de diciembre de 2007) fue un médico norteamericano y neurocientífico quien hizo contribuciones significativas en los campos de la psicología y la psiquiatría.

Paul D MacLean

Paul D MacLean

Empezó a desarrollar su teoría inspirado en los textos neurocientíficos de James Papez  (1883-1958, fue un neurólogo estadounidense. Graduado en la Universidad de Minnesota, su principal contribución a la ciencia y en especial a la neurología y psicobiología es la descripción del llamado circuito de Papez, que es la vía neuronal en la que se produce el control de la corteza cerebral, sobre las emociones; Papez fue el primero en proponer el sistema límbico, como sistema de control de las emociones, lo que supuso un gran avance en la biopsicología de la emoción) y proponiendo el sistema límbico como centro de las emociones.

A partir de esos pequeños pasos, Paul MacLean fue desarrollando una teoría que tomaría fuerza a finales de los años 70. Sin embargo, no fue hasta 1990 cuando sus estudios, sobre la teoría del cerebro triúnico, fueron plasmados en el libro conocido como «el cerebro triuno en la evolución».

Paul MacLean planteaba una estructura cerebral dividida en tres sistemas cerebrales (comúnmente conocidos como los tres cerebros) interconectados entre ellos, definió cada estructura y creo la conocida teoría del cerebro triúnico o cerebro triuno. Dichos sistemas se dividen de la siguiente manera:

  • Cerebro reptiliano o Sistema reptiliano
  • Cerebro límbico o emocional o Sistema límbico
  • Cerebro racional o neocórtex o Sistema neocórtex

Tres cerebros – Una persona

Tres cerebros – Una persona

La teoría del cerebro triuno o teoría de los tres cerebros de MacLean surgió con el objetivo de agrupar diferentes zonas neuronales según su función y en el orden de aparición evolutiva (de los sistemas más primarios hasta aquellas estructuras más avanzadas y propias de los seres humanos). Además, según Roger Wolcott Sperry (-Hartford, Connecticut; 20 de agosto de 1913-Pasadena, California; 17 de abril de 1994- fue un biólogo, neurocientífico y psicólogo estadounidense) y MacLean, estas estructuras están diferenciadas física y químicamente.

En esencia, la teoría de los tres cerebros plantea una novedosa manera de reagrupar nuestro cerebro. Estos tres bloques o secciones son conocidas como el cerebro reptiliano, el cerebro límbico o emocional (coincidiendo con el sistema límbico de Papez) y el cerebro racional.

Dichas secciones están conectadas entre ellas, pero a su vez funcionan de manera independiente. Por lo que se envían información constantemente a pesar de estar centradas, cada una en una función concreta.

La teoría del cerebro triuno de MacLean – Teoría del Cerebro Triunico.

El cerebro reptiliano o Paleoencéfalo.

Algunas veces, es denominado complejo reptiliano porque es típico de los reptiles y tiene un papel muy importante en el control de la vida instintiva. En consecuencia, este cerebro no está en capacidad de pensar, ni de sentir; su función es la de actuar, cuando el estado del organismo así lo demanda. Desde un punto de vista evolutivo, el cerebro reptiliano es el más primario y está muy relacionado con la piel y con los poros.  Esta área del cerebro controla las necesidades básicas y la reacción de “luchar o volar”, la cual se refiere a los cambios en el funcionamiento fisiológico, que acompañan al estrés o a la amenaza.

El complejo reptiliano, en lo seres humanos, incluye conductas que se asemejan a los rituales animales, como el anidarse o aparearse.  La conducta animal está en gran medida controlada por esta área del cerebro.  Se trata de un tipo de conducta instintiva programada y poderosa y, por lo tanto, es muy resistente al cambio.  Aquí se organizan y procesan las funciones que tienen que ver con el hacer y el actuar, lo cual incluye: las rutinas, los valores, los hábitos, la territorialidad, el espacio vital, condicionamiento, adicciones, rituales, ritmos, imitaciones, inhibiciones y seguridad.

Nuestra Herencia Sauria

Nuestra Herencia Sauria

En síntesis, este cerebro se caracteriza por la acción, tiene como función principal la de controlar la vida emotiva, lo cual incluye los sentimientos, el sexo, la regulación endocrina, el dolor y el placer.

Cerebro reptiliano

Cerebro reptiliano

Anatomía del cerebro reptiliano

Encontramos el cerebro reptiliano en la zona baja del encéfalo: el tronco cerebral y el prosencéfalo. El cerebro reptiliano según la psicología, es aquella zona en la que se controlan los niveles de energía de nuestro cuerpo y se busca el equilibro, también conocido como homeostasis.

Muchos expertos afirman que la amígdala forma parte del cerebro reptiliano, sin embargo, el debate sigue abierto, entre los que opinan que este órgano forma parte del sistema límbico y los que opinan que es parte del cerebro instintivo.

El cerebro emocional o límbico

Según la teoría del cerebro triuno, esta zona apareció con los primeros mamíferos y se fue desarrollando por encima de lo que hemos definido anteriormente como cerebro reptiliano. El cerebro límbico está considerado el centro de las emociones, es decir: nuestro sistema nervioso emocional. Y se encarga de producir y generar emociones en nuestro sistema nervioso.

Está asociado a la capacidad de sentir y desear. Está constituido por seis estructuras anatómicamente funcionales:

  • El tálamo (placer-dolor),
  • La amígdala (nutrición, oralidad, protección, hostilidad),
  • El hipotálamo (cuidado de los otros, características de los mamíferos),
  • Los bulbos olfatorios,
  • La región septal ( sexualidad) y,
  • El hipocampo (memoria de largo plazo).

Cerebro Límbico

Cerebro Límbico

Vale decir que, en estas zonas están las glándulas endocrinas más importantes para el ser humano: pineal y pituitaria. En este sistema se dan procesos emocionales y estados de calidez, amor, gozo, depresión, odio, etc., y procesos que tienen que ver con nuestras motivaciones básicas.

Es importante afirmar, que esta zona tiene una función muy adaptativa: produce respuestas emocionales y genera un aprendizaje muy importante a nivel experiencial. Nuestros sistemas de memoria, motivación, activación y atención suelen funcionar de una manera más productiva, cuando se ven influenciados por las emociones.

Pongamos un ejemplo: recordaremos mejor un acontecimiento si hemos sentido una fuerte emoción (como ir al concierto de nuestro grupo favorito). En cambio, solemos olvidar aquellos hechos, que no nos producen respuestas emocionales intensas.

Ternura manifiesta

Ternura manifiesta

Esta parte es capaz de poner el pasado en el presente (presente + pasado) y por tanto se produce aprendizaje y se activa cuando nos emocionamos. Facilita la calidad de vida, que da la calidez en las relaciones humanas. Es razonable pensar que el desarrollo de la memoria se asocia a momentos emocionalmente intensos, como la muerte de los seres queridos. De acuerdo a esto, posiblemente la aparición de enterramientos (entierros de muertos), en nuestros antepasados, implica una consideración por el pasado. Muestra una capacidad de trascender el imperativo del presente, dando respeto al pasado.

El sistema límbico o cerebro emocional, es la zona encargada de regular las emociones y modular el modo en el que las expresamos.

El cerebro racional o neocórtex.

El cerebro racional o neocórtex

Finalmente, según esta interesante teoría de los tres cerebros, nos encontramos con la neocorteza o cerebro racional: esta parte de nuestro cerebro se encarga del procesamiento cognitivo, las capacidades intelectuales y de proporcionarnos habilidades, como la  toma de decisiones razonadas y lógicas.

Popularmente al cerebro racional se le da el nombre de materia gris, sin embargo, el neocórtex está formado por diversas estructuras encefálicas, entre ellas destacan el hemisferio izquierdo y el hemisferio derecho de la corteza cerebral. Otros nombres con los que encontramos esta zona,  es el isocórtex y también el neopalio.

Cerebro Racional – Corte

Cerebro Racional – Corte

Es el lugar donde se llevan a efecto los procesos intelectuales superiores.

El hemisferio izquierdo está asociado a procesos de razonamiento lógico, funciones de análisis, síntesis y descomposición de un todo en sus partes.

El hemisferio derecho, en el cual se dan procesos asociativos, imaginativos y creativos, se asocia con la posibilidad de ver globalidades y establecer relaciones espaciales.

Hemisferios

Hemisferios

La neocorteza se convierte en el foco principal de atención en las lecciones que requieren generación o resolución de problemas, análisis y síntesis de información, del uso del razonamiento analógico y del pensamiento crítico y creativo.

Debemos comprender el cerebro racional, como una estructura prácticamente única en nuestra especie. Según MacLean, el ser humano es el único organismo que tiene completamente desarrollado el neocórtex.

Además, el cerebro racional también nos ayuda en los procesos de autoconciencia, reflexión y organización.

Racionalidad es….

Racionalidad es….

Anatómicamente hablando, encontramos el neocórtex en la zona más superficial del encéfalo, conforma el 90% de la corteza cerebral y se extiende en forma de pliegues y circunvalaciones.

Luego de haber refrescado en parte, conocimientos sobre el Dr Paul MacLean y su teoría del cerebro triuno, ya estamos en capacidad de entender el porqué, probablemente, el respondería con una respuesta como, “al fin el proceso evolutivo del cerebro, coloca al Neocórtex, en el lugar que le corresponde”.

Está claro, lo que se plantea, a futuro, es la desaparición, de las señoriales, distantes, majestuosas, inflexibles e inhumanas trono – oficinas, para convertirse en casi, unos clubes sociales, donde lo común sea la sencillez y liviandad, en otras palabras, las actitudes reptilianas, quedarán relegadas a planos mucho menores, encontrando cada vez menos cabida entre las clases trabajadoras y empleadoras, lo que, por ende, deberá mejorar las relaciones empleados – patronos.

Muy a pesar, de que la teoría del Cerebro Triúnico, puede contener elementos y argumentos absolutamente interesantes, para la psicología, el modelo de MacLean resulta demasiado simple, con respecto a toda la información que poseemos hoy en día. Eso es debido a que el sistema nervioso se trata de una compleja red de células neuronales que trabajan en equipo, aunque podemos diferenciar anatómicamente diferentes partes del sistema nervioso y del cerebro.

RED o EN RED O

RED o EN RED O

Mi opinión acerca de la Teoría del Cerebro Triuno.

Considero que el modelo de MacLean, nos da respuestas o explicaciones, que sirven de guía, para revisar muchas conductas, actitudes y desenvolvimientos en nuestro interactuar y, de alguna manera, puede contribuir con “el proceso de convertirnos en persona”, como estableció Carl Rogers, que es lo que finalmente cuenta.

Esta teoría es útil para entender el mundo de nuestras emociones, y ante todo, ser conscientes de esa necesidad última, por invertir tiempo y esfuerzo en procurarnos un adecuado desarrollo emocional. Al igual que ejercitamos nuestro cuerpo e intentamos cada día cultivar nuestro intelecto, seamos más hábiles gestionando esas pulsiones, esas emociones primitivas que, aunque nos cueste creerlo, rigen gran parte de nuestra vida.

Pero esto no queda aquí, pues gracias a la idea que dio comienzo a este artículo, como son las oficinas del futuro y la relación que, hasta ahora, güardan las majestuosas y territoriales oficinas de lujo, que son manifestaciones de una conducta netamente reptiliana, es cómo podemos ahondar, un poco, en el modelo de MacLean y a la vez  aprovechar, para aprender a interactuar, manejando nuestro triúnico cerebro.

Si vemos objetivamente y aceptamos que somos seres evolucionantes, esta palabra se me ocurre ahora, para calificarnos como seres potencialmente evolutivos, podemos aplicarnos el modelo de MacLean o la teoría del cerebro triuno, ubicarnos en diferentes situaciones y actitudes cotidianas y entender con claridad, con qué tipo de cerebro estamos actuando o respondiendo, para finalmente familiarizarnos, lograr educar y equilibrar nuestra conducta y “moldear” nuestra personalidad, desde nuestro triúnico cerebro, porque al fin y al cabo, no podemos desprendernos de ninguno de los tres, es decir, que debemos aprender a manejar adecuadamente, nuestro cerebro triuno.

Aprendizaje

Aprendizaje

Así como Paul MacLean, desarrolló su teoría, también el Dr Howard Gardner, defiende que, así como hay muchos tipos de problemas que resolver, también hay muchos tipos de inteligencias, que se pueden adaptar y aplicar a la resolución de los mismos. Esta es la conocida teoría de las Inteligencias Múltiples. Por otra parte el Dr William Edwuard «Ned» Herrmann, (1922-1999).  Ha propuesto la teoría del Cerebro Total que se ex-presa en un modelo que integra la neocorteza (hemisferios derecho e izquierdo) con el sistema límbico.

Para no dejar a los lectores  de almargendeltiempo, como novia ‘e pueblo y mucho menos, faltarles el respeto, entrego un pequeño adelanto, de lo que va a ser otro artículo, que DIOS mediante, pronto, con gran interés, placer, beneplácito, cariño, ganas y alegría, estaré compartiendo con todos.

Teoría de las Inteligencias Múltiples.

Esta teoría fue descrita en 1983 por Howard Gardner (Scranton, Pensilvania; 11 de julio 1943) es un psicólogo, investigador y profesor de la Universidad de Harvard, conocido en el ámbito científico por sus investigaciones en el análisis de las capacidades cognitivas y por haber formulado la teoría de las inteligencias múltiples. Por esta teoría y por sus implicaciones en la mejora global de la educación,​ le fue concedido el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales en 2011. Para Gardner la inteligencia no es un conjunto unitario que agrupe diferentes capacidades específicas, sino una red de conjuntos autónomos interrelacionados entre sí.

Howard Gardner

Howard Gardner

Todos destacamos de una manera especial en algún área en particular, estas aptitudes innatas, nos permiten ser mejor o peor, en el desempeño de ciertas tareas.

Howard Gardner defiende que, así como hay muchos tipos de problemas que resolver, también hay muchos tipos de inteligencias, que se pueden adaptar y aplicar a la resolución de los mismos.

Hasta la fecha, Howard Gardner y su equipo de la Universidad de Harvard han identificado ocho tipos distintos de inteligencia:

  • Lingüístico – verbal,
  • Lógico – matemática,
  • Viso – Espacial,
  • Musical,
  • Corporal – Quinestésica,
  • Intrapersonal,
  • Interpersonal y
  • Naturalista.

Inteligencias Múltiples

Inteligencias Múltiples

Teoría del Cerebro Total.

William Edward «Ned» Herrmann (1922 – 24 de diciembre de 1999) fue un investigador y autor estadounidense, conocido por su investigación en psicología de las organizaciones.​ Es considerado al «padre de la técnica de preferencias cerebrales.

William E Herrmann

William E Herrmann

 Herrmann, basado en los estudios previos sobre la dominancia cerebral de  Sperry,  y  en la teoría del cerebro triuno de MacLean, así como en los resultados de sus propias investigaciones, ha propuesto la teoría del cerebro total.  Concibe esta integración como una totalidad orgánica dividida en cuatro áreas o cuadrantes, a partir de cuyas interacciones se puede lograr un estudio más amplio y completo de la operatividad del cerebro y sus implicaciones para la creatividad y el aprendizaje.

Cada una de las áreas cerebrales o cuadrantes realiza funciones diferentes:

Así, el lóbulo superior izquierdo (Cuadrante A) se especializa en el pensamiento lógico, analítico, crítico, matemático y basado en hechos concretos.

Por su parte, el lóbulo inferior izquierdo (Cuadrante B), se caracteriza por un estilo de pensamiento secuencial, organizado, planificado, detallado y controlado;

El lóbulo inferior derecho (Cuadrante C) se caracteriza por un estilo de pensamiento emocional, sensorial, humanístico, interpersonal, musical, simbólico y espiritual. 

Finalmente, el lóbulo superior derecho (Cuadrante D), se destaca por su estilo de pensamiento conceptual, holístico, integrador, global, sintético, creativo, artístico, espacial, visual y metafórico.

Cuadrantes de Herrmann

Cuadrantes de Herrmann

Como todo, en la vida, dependiendo del interés que este tema despierte, en cada lector, puede resultar muy aburrido y tedioso o muy apasionante e interesante, como persona que cree firmemente en la libertad, brindo la posibilidad de escoger o decidir libremente, en cual platillo de la balanza se monta, en lo particular siento una gran atracción por este tema, porque me ha ayudado a entender muchas cosas que, estaban confusas, turbias o nada claras en mí, evidentemente que, con esto, no quiero decir que basta con leer, acerca de estos temas, para encontrar soluciones, a casos de conducta o de personalidad, que deben ser tratados por especialistas en la materia, absolutamente no.

Frases para reflexionar.

“Si me engañas una vez, tuya es la culpa. Si me engañas dos, la culpa es mía”. Anaxágoras, filósofo griego (500-428 a.C.)

“El diseño de mi escuela ideal del futuro se basa en dos hipótesis: la primera es que no todo el mundo tiene los mismos intereses y capacidades; no todos aprendemos de la misma manera. La segunda hipótesis puede doler: es la de que en nuestros días nadie puede llegar a aprender todo lo que hay para aprender”. Howard Gardner.

“Cuando alguien que de verdad necesita algo, lo encuentra, no es la casualidad quien lo procura, sino él mismo. Su propio deseo y su propia necesidad le conducen a ello”. Hermann Hesse.

“Los pensamientos obsesivos son la leña que alimenta el fuego de la ira, un fuego que sólo podrá extinguirse contemplando las cosas desde un punto de vista diferente”. Daniel Goleman.

“Con las piedras, que con duro intento los críticos te lanzan, bien puedes erigirte un monumento”. Immanuel Kant

“La autoayuda no es mala, mala es la fábula, que podemos creernos de nosotros”. Yo.

Me despido con un pensamiento de uno de los más grandes educadores del siglo XX, el maestro y experto en temas de educación, el brasileño Paulo Reglus Neves Freire.

Paulo Freire

Paulo Freire

Miguel Alberto Zurita Sánchez. Coro 28 / 11 / 2019.

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