DIVERTIMIENTOS. Olimpio Galicia Gómez
DIVERTIMIENTOS
Hay cuestiones divertidas que compensan, de una u otra forma, a las otras que no lo son tanto, o a las que nunca lo son, logrando un equilibrio emocional importante para la salud del cuerpo, y algunos podrían afirmar que hasta del espíritu.
Divertirse resulta entonces como una necesidad perentoria y cotidiana que el individuo debe buscar, tanto la forma como el momento, para disfrutarlo. Es por tanto un goce, un placer, que permite encaminarse por los mundos efímeros de la felicidad.
Existen muchas formas de diversión, de acuerdo al cristal con que se mire, ya que hay unos cuantos pervertidos que se divierten con el dolor ajeno; hay los sado masoquistas; los pederastas; los adictos; los explotadores; los hijos de p que gozan robando los dineros de la nación.
Pero, trato con este escrito, de ubicar al divertimiento como hecho consciente, decente y favorable para la vida, el cual se deriva de actividades que llevamos a cabo todos los animales de este planeta. Todos jugamos, y jugando nos divertimos; en el juego existe el compartir entre dos o más; al jugar se recrea la mente y se ejercita el cuerpo; en el juego se gana o se pierde (salvo en los de azar) sin que represente algo desfavorable para unos u otros.
Son los niños los que nos indican el camino en el divertimiento a través del juego. Ellos juegan sin reglas o imponiendo y respetando las que se tengan de común acuerdo. Riñen, lloran, dejan de jugar, pero a los pocos minutos continúan participando como si nada ocurrió. Quién no jugó al escondite, al avión, a las metras, al trompo, al volantín, a las cuarenta matas, a la pelota y a tantos otros juegos infantiles que hoy las pantallas han borrado, si no lo hizo, no tuvo infancia.
Ya en esta edad, resulta difícil y complicado los juegos para alcanzar divertimiento, pero existen otras formas que pudieran ser favorables, tal como lo implementa Darío Jaramillo Agudelo, a través de su publicación en las redes, «Gozar Leyendo» Luna Libros, en ella, este escritor Colombiano nos detalla, en resumidos párrafos, los libros que lee y que con gusto y goce sintetiza para que otros como yo también puedan tener ese placer.
Gozo leyendo, disfruto pintando, me relaja la música, trato de jugar con mis nietos, me siento bien preparando comida y, mejor aún, cuando los que la prueban disfrutan saboreando.
En definitiva, yo ando como Epicuro tras el placer permanente, o caminando hacia el disfrute de la vida perdurable.
Olimpio Galicia Gómez
Un comentario
Emilio Hernan Galicia Gomez
Hermano, satisfacción aparte de diversión, necesario sería decir que, jugar es tan emocionante como el estímulo que se siente al obtener el triunfo de un resultado que nos costó desvelos y sacrificios para obtenerlo. Gracias por mantenernos despiertos para seguir jugando. Un gran abrazo