ECO DE UN ROMANCE. Por JULIO CÉSAR JIMÉNEZ

ECO DE UN ROMANCE

En el dédalo del bosque solitario
mezclado con rumores de hojas verdes,
por el eco del silencio son captados
y por muselinas son cubiertos,
que continuando en la espesura se pierden
por paraíso donde todo se ha olvidado
y es donde los espíritus están excentos,
donde sin temor se deja un escarzo.

Solitarios bajo los gigantes ceibos
en pláticas a orillas de un remanso;
pláticas mudas: de miradas y besos,
saciando el deseo hasta el cansancio,
que hasta el musgo de la orilla
queda totalmente mancillado
y también el mirar de las aves en vigilia.

III

Mas el rumor de las hojas verdes
y hasta el tiempo detenido y extasiado
ceden el espacio al momento sublime,
que lo ocupa el susurro enamorado.

JULIO CÉSAR JIMÉNEZ