El Bosco y Rafael Alberti (Síncresis a destiempo). Compendio e idea de Enmanuel Camejo
El Bosco
S’Hertogenbosch (Países Bajos), ca. 1450 – S’Hertogenbosch (Países Bajos), 1516
Jheronimus van Aken, el Bosco, formó parte de una familia de pintores que trabajaron durante seis generaciones, primero en Nimega (ducado de Gueldre), a donde debieron llegar procedentes de Aquisgrán (Aachen) -si su apellido, Aken, es realmente un apellido de origen, como se ha supuesto-, y después en ’s-Hertogenbosch.
Sobre su biografía existen aún muchas lagunas. No se sabe por ejemplo dónde vivían sus padres cuando él vino al mundo, y tampoco consta su año de nacimiento. Aunque se sitúa hacia 1450, lo cierto es que no es posible fijarlo con seguridad. La primera referencia que se conserva sobre el Bosco corresponde al 5 de abril de 1474, cuando, junto con su padre Anthonius y sus dos hermanos, Goessen y Jan, actuó como testigo a favor de su hermana Katharina en la venta de la hipoteca de una casa en el pequeño pueblo de Geffen. Al figurar junto a su padre, Anthonius van Aken, se ha considerado que el Bosco no tenía aún 24 años, la edad legal para intervenir de forma independiente en un documento en ‘s-Hertogenbosch.
En un documento datado el 15 de junio de 1481 el Bosco figura como marido de Aleid van de Meervenne. Esta debía de ser algo mayor que él, pero no tanto como se ha dicho. Aleid no pudo nacer más tarde de 1447, a juzgar por un documento del 2 de septiembre de 1471, en el que ella y su hermana Geertruid, al ser mujeres, cedieron poder a un procurador para actuar en su nombre, de lo que se deduce que tenían al menos 24 años. Como sucede con respecto a su nacimiento, tampoco se sabe cuándo contrajo matrimonio con el Bosco, pero al menos en 1480 ya debían estar casados. Lo que sí consta es que el 30 de julio de 1477 Aleid alquiló una casa llamada “Inden Salvatoer” que había heredado de su abuelo materno, Rutger van Arkel, situada en el lado norte de la plaza del Mercado (en el numero 61 actual) y en la que después viviría con el Bosco.
El contrato se firmó con un cierto Peter Peterss Marsse por un periodo de seis años; esto es, hasta fines de julio de 1483. En ese momento Aleid debía estar soltera, porque en caso contrario su marido habría actuado en su nombre, como hizo después. La boda entre el Bosco y Aleid tuvo que celebrarse por tanto entre el 31 de julio de 1477 y el 14 de junio de 1481.
A las noticias que han llegado hasta nosotros sobre el Bosco, su familia y las propiedades de su mujer, se suman las que se conocen respecto a su condición de miembro de la cofradía de Nuestra Señora. Esta institución, a la que también habían pertenecido como miembros ordinarios sus abuelos y sus padres, tenía su sede en la capilla del mismo nombre en el lado nordeste de la iglesia de San Juan de ‘s-Hertogenbosch. El Bosco ingresó como miembro ordinario de la cofradía en 1486-87 (fol. 42v). Su nombre, “Jheronimus, hijo de Anthonis van Aken”, figura junto con los de los más de trescientos cincuenta cofrades de los Países Bajos y de Alemania que ingresaron ese año. De forma excepcional, tan solo un año después se convirtió en hermano jurado. El nombre de “Jeroen el pintor” aparece con la misma letra en el margen del documento en el que se inscribieron los nuevos hermanos jurados (1487-88; fol. 95) que, por norma, cada año participaban en el banquete del Cisne, que se hacía en torno a la Navidad.
En el verano de 1516, se declaró en ‘Hertogenbosch una epidemia con unos síntomas que nos hablan de una especie de cólera. Es posible que el Bosco fuera víctima de ella. No se sabe qué día murió. Lo que sí consta en las cuentas de la cofradía de 1516-17 (fol. 119) es que el 9 de agosto de 1516 se celebró en su capilla de la iglesia de San Juan una misa de requiem por “Jeronimus van Aken pintor” oficiada por el deán Willem Hamaker, asistido por un diacono y un subdiacono, y en la que actuaron un coro y un organista. El que estuvieran presentes además los sepultureros apoya la idea de que la misa era su funeral, por lo que el artista tuvo que fallecer pocos días antes. El tesorero incluyó en la relación anual sobre los fallecidos en 1516 (fol. 159v) a “Jeronimus van Aken pintor hermano jurado”. No se sabe dónde se le enterró, pero es probable que fuera en el patio de la iglesia, al que se accedía directamente por el transepto norte.
Fuente: Museo Nacional del Prado
Rafael Alberti
Rafael Alberti Merello (El Puerto de Santa María, Cádiz, 16 de diciembre de 1902 – El Puerto de Santa María, Cádiz, 28 de octubre de 1999). Poeta español de la Generación del 27.
Empieza el bachillerato en el Colegio de los Jesuitas del Puerto de Santa María. En 1917 se traslada a Madrid, donde abandona el bachillerato por la pintura, que ejerce una gran influencia en su obra; en 1922 realiza una exposición en el Ateneo. Por motivos de salud se traslada, poco después, a vivir en las sierras de Guadarrama y Rute, donde empieza a escribir sus primeras poesías, recogidas bajo el título de Marinero en tierra. Con este libro obtiene el Premio Nacional de Literatura (1924-25), otorgado por un jurado que integraban Antonio Machado, Menéndez Pidal y Gabriel Miró. A esta obrasiguieron La Amante (1925) y El alba de alhelí (1925-26). En sus primeros libros se aprecia claramente la influencia de Gil Vicente, del Cancionero y Romancero españoles y de otros autores como Garcilaso, Góngora, Lope, Bécquer, Baudelaire, Juan Ramón Jiménez o Antonio Machado.
Su poesía es «popular» -según Juan Ramón Jiménez-, «pero sin acarreo fácil, personalísima, de tradición española, pero sin retorno innecesario, nueva, fresca y acabada a la vez, rendida, ágil, graciosa, parpadeante: andalucísima». La etapa neogongorista y humorista de Cal y canto (1926-1927) marca la transición de este autor a la fase superrealista de Sobre los ángeles (1927-1928). A partir de entonces, y tras afiliarse al partido comunista, su obra adquiere tono político. Este giro le lleva a considerar su obra anterior como un cielo cerrado y una contribución irremediable a la poesía burguesa.
La poesía de Alberti cobra cada vez más un tono irónico y desgarrado, como los poemas burlescos Yo era un tonto y lo que he visto me ha hecho dos tontos (1929), Sermones y moradas (1929-1930) y la elegía cívica Con los zapatos puestos tengo que morir (1930). A partir de 1931 aborda el teatro, estrenando El hombre deshabitado y El adefesio. Posteriormente recorre varios países de Europa, pensionado por la Junta de Ampliación de Estudios, para estudiar las nuevas tendencias del teatro.
En 1933 escribe Consignas y Un fantasma recorre Europa, y en 1935, 13 bandas y 48 estrellas. En 1939, al terminar la Guerra Civil española, emigra a la República Argentina, desde donde se traslada a Roma en 1962. En 1945 publica, en Buenos Aires, A la pintura: poema del color y la línea, y además un volumen que abarca la casi totalidad de su obra lírica, Poesía, donde se muestra cierta nostalgia por la patria. Regresa finalmente a España en 1977. Su producción poética continúa con la misma intensidad en estos años, prolongándose sin fisuras hasta muy avanzada edad.
A su vuelta a España es elegido diputado por el Partido Comunista de España, pero renuncia a su escaño para proseguir su tarea literaria y dar recitales por toda España. Sus libros de memorias cosechan grandes éxitos en las distintas ediciones, cada vez más completas, de los diferentes volúmenes de su Arboleda perdida. Entre las numerosas distinciones y homenajes que se le dedican destaca el Premio Miguel de Cervantes, que le es concedido en el año 1983.
El 20 de junio de 2007, la Biblioteca del Instituto Cervantes en Nápoles es designada con el nombre de Rafael Alberti.
Fuente: Instituto Cervantes
Un comentario
Maria
La pintura y la prosa. El arte y la cultura de la mano , transformando el mundo.