«El viaje de la memoria». Por Enmanuel

El viaje de la memoria

Se pierde la memoria por antiguos recintos. Viaja mas allá del sueño, desnuda neuronas, decodifica genes, busca un código olvidado.
Ese originario código que convinieron los Dioses y que Προμηθεύς (Prometeo) confundiera con una simple flama (falso y vano espejismo de poder).

La memoria se deshace en distancias, sabe que la intuición la guía y el conocimiento la engaña. Se detiene a veces a escuchar olvidadas leyendas, escritas en lapidadas sinapsis. Vuelve al inicio y recoje fragmentos de timina, citosina, adenina y guanina, pretendiendo armar el rompecabezas al azar y reescribir sus instrucciones. Se pierde en el albur.

Luego le llegan voces (o lo que cree que son):
«amoníaco y carbono, amalgama particular de la vida, tinta de deidades».
Pero, ¿cómo encontrar, en semejante combinación, el sagrado pigmento?, y si lo encontrara… ¿qué escribir con esa tinta?.

La memoria se disipa.

Enmanuel