CUANDO VAYAS A MARCHAR. Por Julio César Jiménez
CUANDO VAYAS A MARCHAR
I
Cuando vayas a marchar,
déjame, por favor
tu sonrisa tan sensual,
de tus labios el sabor,
una brizna de tu pelo,
una mirada de amor,
un poquito de tus celos,
un poquito de dolor,
una lágrima en mi pecho
y de tu piel el olor.
II
Cuando vayas a marchar,
déjame, por favor,
algo con qué recordar
de tu presencia el calor,
el dibujo de tu cuerpo
bajo los rayos del sol,
una caricia de miel,
la vibración de tu voz
y una mirada muy triste
por el pesar de tu adiós.
III
Cuando vayas a marchar,
déjame, por favor
un rato cerca de ti
para oír tu corazón
que juntito con el mío
se escuchen latir los dos
para ver si te conmueves
y se remueve tu amor
y no quedarme solito
con mis plegarias a Dios.
Julio César Jiménez.
Un comentario
Luisa Acosta
Bonitos versos, describen muy bien los anhelos de un enamorado.