«Confesión Hiperbórea». Por Enmanuel

Confesión Hiperbórea

Aún aguardo en los vastos territorios helados, donde bóreas custodia el portal. Habito en el confín septentrional de la ecúmene, al amparo del silencio y la noche.  A los lejos, me amurallan los montes Rípeos, alejándome de esa plaga en que se han convertido los Sapiens.

¿Qué como me llamo?… llamadme hijo de los primeros Dioses, aquellos con los que aún frecuento. Que suben y bajan tratando de intervenir la historia, que hace poco mas de 45.000 años trastocaron los venidos del África Oriental, engendrados por viciosos lemures.

¿Que qué espero con esto?…  dejar por escrito, en esta red virtual (amalgama de vicios y virtudes),  que fuistéis vosotros, junto con la furia de los campos Flégreos, quienes exterminaron a los habitantes del Valle del Neander.

Enmanuel