Historia y Guerra. Por Delfos

Dicen que la historia del hombre es la historia de la guerra (nunca la del perdón y el oficio).
Siempre ha sido la historia de la guerra. Desde la de los antiguos egipcios y sumerios, pasando por persas y espartanos, sin olvidar individualidades belicas, como Pirro de Épiro, Anibal, Espartaco, Mitríades, Vercingetorix, Alarico, Julio Cesar… Nerón.
Pero poco sabemos (ni preguntamos) cómo se llamaban el panadero y su mujer, el hortelano y su perro, el curtidor de cueros y su taller.
No recuerdo muchos nombres de hilanderas, pescadores, talabarteros, pastores o serenos.
La historia del hombre está llena de nombres de batallas, heráldicas de guerra, gritos de «a deguello», arcos, catapultas y cañones. Huelgan los frontones con placas de héroes caidos o vencedores.
Casi nunca conocemos quien yace bajo una lápida sin nombre o quien vivió en la tercera casa de la angosta calle que daba al puerto.
¿Y para qué tanto odio bañado en sangre?… si al final todos anhelaban la paz.
¿Para qué la apología militar?… si al final, general y soldado, querían regresar, a casa, a abrazar a sus hijos.

Delfos