Semana Aniversaria

PARA LOS QUE ESCUCHAN SU INTUICIÓN. Por Beatrice

Beatrice

«Es como una sensación, un -yo no sé qué- que me dice que sé algo, y cuando le presto atención, nunca me equivoco»

Para muchos de nosotros la intuición nos acompaña y nos guía a la hora de tomar decisiones, sea algo complejo relacionado con el ámbito profesional o algo tan simple como salir de casa en “el momento correcto”. Usualmente le atribuimos un carácter místico y espiritual, pero suele resultar muchas veces más simple intentar entender a la intuición como un proceso cognitivo que se sitúa en nuestro cerebro. Pero ¿de dónde viene y que describe la palabra intuición?

Intuición, proviene del latín (Intuito “mirar hacia dentro” o “contemplar”) y hace referencia al conocimiento inmediato e impredecible en que no media la razón como forma de alcanzarlo.

UN POCO DE HISTORIA

Platón y Aristóteles por los años 500 a.C. ya hablaban acerca del pensar intuitivo y el pensar discursivo (identificado esencialmente con las matemáticas). Platón destacó el primero como superior y al segundo le adjudica un lugar secundario que sirve de ayuda para alcanzar al primero y Aristóteles luego sugiere el hecho de considerar encontrar el equilibrio entre ambos.

René Descartes en el 1638, afirma en su Regula III, que hay dos actos de nuestra inteligencia o razón que nos permiten conocer ciertamente: la experiencia y la realidad externa; la intuición y la deducción. La deducción/intuición para él, es “un conocimiento inmanente, interior de la conciencia para la conciencia”. Es un conocimiento puro, simple, sin mezcla, racional. Es el Verum est factum.

En el budismo, según señala el maestro budista Alan Wallace, la intuición es sinónimo de sabiduría o conciencia primordial. Es también la décima perfección (paramita), es decir el último catalizador de la iluminación o trascendencia del sufrimiento. Wallace señala que la intuición, como es entendida en esta tradición, es un modo de conocimiento primordial que siempre está ahí, esperando a ser descubierto como el Sol entre las nubes y es especialmente lo que se desvela en sistemas de meditación avanzados como el mahamudra y el dzogchen.

Por otra parte, la Psicología Cognitiva, desarrolló tres grupos de teóricos que postulan criterios sobre el proceso intuitivo.

a.       Los que consideran que la intuición es la mejor forma de tomar decisiones en la vida;

b.       Los que opinan que debe seguirse siempre la razón y la lógica a la hora de decidir,

c.       Y los que piensan que al resolver un problema debe haber una mezcla entre ambos tipos de procesos.

En el 2008, el Psicólogo Alemán Gerd Gigerenzer, presenta una muy interesante forma de ver y describir a la intuición. Gigerenzer, defiende la idea de que la intuición es vital en las vidas de los seres humanos, y que sin ella, no llegaríamos a ningún lado. También señala que todas las personas, expertas o no, deciden con base en las intuiciones todo el tiempo, porque esta es considerada como la inteligencia del inconsciente. Concluyendo su planteamiento con la afirmación de que la experiencia permite aumentar la seguridad en la intuición.

 

Ahora bien, ¿quisieras desarrollar ese -yo no sé qué- que te ayuda a la hora de decidir?

Practica meditación y Mindfulness. Pareciera que todo aquello que nos ayude a conocernos mejor a nosotros mismos y nos aporte un mayor equilibrio emocional nos ayudará por consecuencia a mejorar nuestra intuición.  

La meditación, e incluso filosofías como el Mindfulness tienen beneficios claros para nuestra mente: nos hace más capaces de absorber estímulos e información, incluso cosas que antes nos pasaban desapercibidas. Una forma práctica de agregarlas a tu día a día es despertando de 5 a 10 minutos antes de tu hora habitual y sentándote en una posición cómoda en el lugar favorito de tu hogar. Cierra tus ojos e intenta enfocarte en tu respiración, y a cada pensamiento que transite en tu cabeza trátalo como algo fugaz, sin juicio, sin preguntarte por qué o para que, solo deja que pase y vuelve a prestarle atención a tu respiración.

De este modo, y luego de haber transitado por todos estos datos, queda poco espacio para sospechar que dichos procesos respondan a la mera imaginación o a la casualidad. La intuición no solo tiene unos correlatos neuronales, es parte de nuestra experiencia, se nutre de la esencia de nuestra personalidad y de ese baúl del subconsciente donde duerme la esencia de nuestro ser.

Por eso hablar de la intuición no es hablar de pseudociencia, en realidad, es hacer uso de ese mecanismo que tanto ha definido al ser humano. Reflexionemos en ello, atendamos a esa voz interna o si quisiéramos, contemplemos a través de nuestro pensamiento analítico ese “yo no se qué” que nos acompaña en la toma de decisiones.

10 Comentarios

  • Nestor Campos

    Excelente artículo, me encanta mucho la forma como describe la meditación. La intuición ha jugado un factor fundamental en la toma de decisiones del ser humano a través de los años, especialmente en escenarios complejos. Felicidades por tú artículo y la forma descriptiva del mismo. Mi intuición me dice que disfrutaría hablar contigo por horas.

  • Nilsa

    Excelente artículo, mi bella sobrina favorita. La intuición es definitivamente parte de nuestra esencia como seres humanos, pocas veces nos equivocamos al hacerle caso a ese » no sé qué «. Estoy muy orgullosa de ti. Te amo infinito

  • Felisabel

    Me encanta la sintonía que ejerce ese «no se que»donde la familia juega un importante papel que los conecta por siempre. En definitiva debes seguir tu intuición y te comerás al mundo. Bendiciones y éxito. Tqm

    • Iliana

      Excelente!!!Me encanta tu aporte sobre la Intuición.Que Dios te conduzca por el camino del Éxito.Dios te bendiga grandemente.

    • Bartola Ferrer

      Excelente.

      Ese estado que te lleva a esa paz, ese abrir la puerta hacia adentro y aprender a conocernos nos da el poder sobre nuestra mente.

      Gracias, gracias, gracias

  • Torcuato Da LucaTena

    Excelente amiga Beatrice, usted escribe con autoridad y sensibilidad. Muy oportuno el tema de Drexsler
    Felicitaciones