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«El Sacrificio Del Gran Rey». Por Marcelo Jesús Moreno Mendoza

El Sacrificio Del Gran Rey


Hace mucho tiempo, antes de que siquiera existiese el bien y el mal, el mundo se encontraba totalmente en paz, era gobernado por 3 gloriosos reyes, quienes se aseguraban de mantener las cosas en orden. Cada rey tenía el mismo poder, eran conocidos como la gran trinidad.
El poderoso trio de reyes, tenía un cuarteto de muy confiados ministros, cada uno se encargaba de un cargo bastante importante, por ejemplo, Mija’el se encargaba de los ejércitos; Gavri’el de transmitir los mandatos y edictos reales; Refâ’êl se encargaba de dar el visto bueno a la medicina que se descubría; Lux Fero, el último ministro, era el encargado de iluminar el camino de todos los súbditos del reino. No conforme con solo eso, quiso enfrentarse a los reyes, para obtener el poder absoluto, pero no podría contra ellos si se enfrentaba solo, por lo que se movió entre las sombras, para sembrar desconfianza y cizaña entre el pueblo y el ejército del reino.
Un día bastante oscuro, en que los reyes estaban reunidos para decidir sobre el futuro del reino, escuchan en las afueras del castillo, un alboroto, una poderosa legión de guerreros se acercaba velozmente hacia el castillo donde estos se encontraban. Lux Fero, comandaba el ejército que traicionó a la trinidad, para derrocarlos. Mija’el, el encargado del ejército de la trinidad, se enfrentó junto a los que permanecieron fieles, y después de una larga batalla, la victoria se decantó por el bando de Mija’el y sus soldados fieles a los tres reyes.
Desterrado, Lux Fero se marchó con su ejército, se estableció en lo más alejado del reino, la maldad empezó a sembrarse una vez que el ex ministro, mandó a sus súbditos a sembrar el caos por todos esos lugares que aún la trinidad no había reclamado.
Pasaron los años, y Lux Fero, creó su propio reino de terror, todo lo opuesto al reino de la trinidad, él se encargaba de robar las buenas intenciones de las personas, fue el creador de la brujería, y se la enseñó a cualquier persona que deseara poder, lo único que exigía, era que se volviera su esclavo por el resto de su vida, tendría libertad para hacer lo que le diera la gana, hasta que este le reclamara sus servicios.

La trinidad, viendo cómo tantas personas eran condenadas a una esclavitud tan horrible, decidió tomar cartas en el asunto, Gavri’el, el ministro encargado de comunicar los edictos, mandó a todos los que estaban a su mando, a diferentes lugares fuera del reino de la trinidad, todos debían proclamar sobre el arrepentimiento de aquellos que hacían el mal; cada uno de los mensajeros, fue aniquilado de forma atroz a lo largo del tiempo que eran enviados, lo que encolerizó de gran manera a la trinidad, la humanidad fuera del reino, había sido completamente corrompida por el mal.
Yeshúa, el segundo rey, tras una larga reunión con los otros reyes, llegó a la decisión de ir Él mismo, a enfrentarse al mal creado por Lux Fero. Sabiendo esto, Lux Fero se presentó frente a frente a su contraparte, buscando negociar de manera sucia para conseguir su poder y que ambos tomaran el poder absoluto, Yeshúa se mantuvo totalmente firme, por lo que su enemigo se retiró planeando una venganza mucho mayor contra aquel que se atrevió a rechazarlo en múltiples ocasiones.
El segundo rey, formó un pequeño grupo de hombres dispersos por el mundo, que todavía se mantenía fiel a la bondad. Los preparó durante tres años, para que se pudieran enfrentar contra cualquiera que quisiera hacerles mal, les enseñó a cómo lograr la conversión de los corazones de estos infieles, para que retomaran el buen camino, que volvieran a su juicio.
Al cabo del tercer año, los secuaces de Lux Fero, lograron atrapar al segundo rey, lo castigó frente a una gran multitud, e incluso le dio muerte frente a sus amigos. De esta manera, lograría perpetuarse en el poder, corrompería los corazones de aquellos que estuvieran con su rey; lo que no sabía, es que todo eso estaba planeado desde el principio, el segundo rey debía morir y resucitar posteriormente, con esto demostraría que su poder era mucho mayor al que tenía el ex ministro de la trinidad. Yeshúa volvió a su reino, junto a los otros reyes, dando comienzo a las acciones de ES, el tercer rey.
Todo aquel que se declaraba partidario del bien, era protegido por ES, y el poder de toda la trinidad, desde ese entonces, la batalla por la conversión de los corazones, se mantiene a día de hoy, las fuerzas de Lux Fero, han intentado por largos años, dominar por completo el mundo, pero los fieles seguidores de la trinidad, han luchado valerosamente para mantener a raya, dichas fuerzas del mal.

Marcelo Jesús Moreno Mendoza

Leo Brouwer, Canción de Gesta