Habían sido extraordinariamente extraños estos últimos días. Por Enmanuel
Los signos en el cielo no mentían. Habían sido, extraordinariamente extraños, estos últimos días:
Un cometa verde que terminó en el cajón de la ropa.
Un tornado que elevó al cielo los colores de la tierra.
Aquel sonido persistente e impreciso que resultó ser un grito del sol.
Finalmente (y el mas extraño de todos) tu fotografía autografiada en mis apuntes de matemática.
(Sin lugar a dudas, habían sido extraordinariamente extraños, estos últimos días).
Enmanuel
Un comentario
Maria
lo inesperado, es lo mas sorprendente…